Un poco de Historia
La Iglesia Prioral del Castillo es la Sede Canónica de la PRIMITIVA, REAL Y PONTIFICIA, ILUSTRE Y VENERABLE HERMANDAD Y COFRADÍA DE NAZARENO DE LA SANTA VERA CRUZ, SANTÍSIMO CRISTO DE LA SANGRE Y NUESTRA SEÑORA DEL MAYOR DOLOR.
La Hermandad de la Vera Cruz+Cruz esta pues, íntimamente ligada al Castillo de manera que su historia no puede entenderse sin la historia de su sede. El Castillo de Aracena se erigió en el siglo XIII en la época islámica, sobre una antigua fortaleza musulmana.
El recinto amurallado estaba partido en dos en su interior, con la torre del homenaje defendiendo la barrera que dividía su interior.
La fortaleza consta de alcazaba, con torre del Alcaide, aljibe y murallas flanqueadas por torres, así como una línea de cerca que albergaba en su interior las viviendas medievales.
Adosada a la Iglesia hay una torre mudéjar, es la iglesia más antigua y emblemática de Aracena, consta de tres naves a igual altura con coro a los pies y presbiterio poligonal al que se adosa la torre en el lado del Evangelio. En el muro del hastiar aparece un porche, mientras el ábside se nos muestra interrumpido por un gran camarín barroco. En su interior destacan bóvedas nervadas de esquema estrellada.
La construcción del templo debió iniciarse a finales del Siglo XIII.
Las obras quedaron paralizadas a lo largo del Siglo XIV, para reanudarse a principio del Siglo XV, prolongándose durante toda esta centuria, en la que se aprecia claramente el influjo de la Catedral de Sevilla. La tribuna del coro, la portada de los pies y la del lado norte son ya de un gótico tardío.
Sufrió entonces un largo periodo de decadencia que duró todo el siglo XVII, en parte por la construcción de la nueva parroquia que dejó la prioral del Castillo sin uso litúrgico, coincidiendo con la expansión del pueblo por el valle y el despoblamiento del cerro, en parte por la epidemia de peste de 1599 en que la iglesia del Castillo fue utilizada como hospital, pero también por la aparición de nuevas hermandades más pujantes inspiradas por órdenes religiosas de carmelitas o dominicos que favorecieron el culto a otras imágenes.
Pese al descenso del número de hermanos, la Hermanad de la Vera Cruz se mantuvo en el Castillo, gracias a ésta se conservó este templo.
Es por aquel entonces cuando probablemente se funde la de Aracena, siguiendo los pasos de Sevilla a la que históricamente hemos estado tan unidos y tanto hemos emulado.
El significado de la cruz no fue comprendido de inmediato, sino que con el paso de los siglos lo que empezó siendo instrumento de tortura y ejecución, pasó a ser medio de salvación y signo de identificación cristiano frente a otras religiones.
En el año 312 el emperador Constantino antes de la batalla contra los sucesores de Diocleciano, persecutor de los cristianos, tuvo la visión de una cruz desnuda y victoriosa y la leyenda “In hoc signo vinces”. La victoria de Constantino en la batalla bajo el signo de la cruz, significó no sólo su victoria, sino la del cristianismo dentro del imperio romano, pues al año siguiente se promulgó el Edicto de Milán por el que se dejó de perseguir a los cristianos, lo que permitió su expansión por todo occidente.
Su madre Santa Elena, quiso buscar la Cruz verdadera en Palestina y la halló en mayo del 325.
De ella se hicieron numerosos “lignum crucis” que se repartieron por el mundo y que son objeto de devoción y señal del paso de Cristo por la tierra.
La cruz fue entonces concebida como árbol de salvación, unión de lo divino y lo humano, sagrado madero que une la muerte y la vida eterna.
El culto a la Vera Cruz fue promovido por la orden franciscana, habiendo tenido estas hermandades desde siempre un sentido penitencial y asistencial.
En torno a este símbolo se reunieron los gremios de labradores y artesanos para darle culto en su solemne función de mayo y vísperas, tradición que continúa celebrando la Hermandad de la Cruz con gran alegría, haciendo pervivir esta tradición que sin duda, es la más antigua y peculiar de este pueblo.
Posteriormente, con la contrarreforma, la Hermandad de la Vera Cruz, se convirtió en hermandad de penitencia, pero ya antes los hermanos de la Cruz se flagelaban públicamente para purgar sus pecados en imitación a la flagelación de Cristo, eran los llamados hermanos de sangre, en contraposición a los de luz, que eran los que portaban hachones. El Cristo de la Sangre se convirtió en titular de la Hermandad, junto a la Cruz y el Crucificado, el llamado Cristo de la Viga.
En este contexto se desarrollaron las primeras estaciones de penitencia en Semana Santa, como medio por el que el pueblo recibía en la calle ilustración sobre la pasión y muerte de Cristo y como alarde religioso católico frente a la herejía protestante que empezaba a triunfar en Europa.
Pese a que con toda probabilidad es más antigua, por datos indirectos, la primera noticia de la existencia de la Hermandad de la Vera Cruz en Aracena la sitúa en torno al año 1565.
El primer testimonio fehaciente de su existencia, en este siglo XVI, nos lo da el notario Sánchez de Ortega en 1583 con motivo de un jubileo extraordinario concedido por el Papa Gregorio XIII.
La decadencia en el número de hermanos lleva a que la Hermandad solicite al Arzobispo que como sólo hay sangre en la Vera Cruz prefieren de desfilar con luz en la Soledad.
La recuperación de la Hermandad de la Vera Cruz se produce en el Siglo XVIII, con la Virgen del Mayor Dolor atribuida al imaginero Montes de Oca que ocupa el camarín de la Iglesia al menos desde 1727.
En 1734 se le otorga a la Hermandad de la Vera Cruz el título de Ilustre por el Arzobispo de Farsalia Don Juan Manuel Moya de la Torre, confirmada por el Obispo de Barcelona Don Gabino de Valladares, ambos naturales de Aracena.
En 1739 se elaboran las reglas y en 1741 se expide la Bula Pontificia a la Hermandad otorgándole el título de Pontificia por el Papa Benedicto XIV.
En 1794 La Hermandad ya es conocida como Santa Vera Cruz, Señor de la Columna y María Santísima del Mayor Dolor, como aparece en el Panegírico dedicado al ilustre hijo de Aracena, Fray Juan Moya de la Torre, arzobispo de Farsalia.
En 1796 se aprueban las Reglas por el Rey Carlos IV que han servido a esta Hermandad hasta la aprobación de las nuevas en 2006, en las cuales se conservan de las antiguas reglas, la regla nº 87
“Si algunos diputados o hermanos quisieran hacer toros y comedias será por su cuenta, recibiendo esta hermandad los beneficios como limosna”.
Y la regla nº 88
“Si el enemigo común se metiese en el cuerpo de un hermano e hiciese que este tuviera rencores y rencillas el hermano mayor los llamara para ponerlos en paz”.
En el siglo XIX se produce la invasión francesa y la guerra de Independencia, y el Castillo es destinado primero a hospital de sangre de las tropas españolas y luego a subprefectura francesa.
Las imágenes se trasladan en abril de 1809 al convento de Jesús María y José a causa de la instalación del hospital militar de las tropas españolas en la Iglesia del Castillo, en febrero de 1810 las imágenes se trasladan a la parroquia, por abandonar las monjas el convento de Jesús María y José y vuelven al Castillo el 10 de abril de 1814, Domingo de Resurrección. Durante toda esta centuria y probablemente desde el siglo anterior, la Virgen del Mayor Dolor es sacada por el pueblo tras de la cofradía de la Vera Cruz el Jueves Santo, y también en procesión por el Castillo el Viernes de Dolores.
En 1873 se hacen grandes reformas en el Castillo, en el mes de febrero se solicita al Cardenal Arzobispo, por parte de la Venerable orden III de Siervos de María Santísima, servitas de Sevilla se instale en la iglesia del castillo de Aracena una orden servita dependiente de Sevilla.
En marzo de ese mismo año se autoriza dicha instalación para fomentar la devoción a Nuestra Señora del Mayor Dolor y finalmente dicha orden de servitas queda fusionada con la Hermandad de la Vera Cruz.
He aquí algunos datos curiosos de los libros de acta de la Hermandad, en mayo de 1868 se cambia el capillo blanco con cruz azul por capillo azul y cruz blanca, en tela de lana. se suprime los dos cabos con madroño y borlas que penden del cinturón, porque es imposible conseguir que todos tengan la misma longitud.
En enero de 1878 se acuerda comprar la ropa del cuerpo de soldados romanos para acompañar al señor en la procesión del jueves santo un grupo de hermanos adelanta el dinero con el privilegio de poder elegir a los que van a vestirse hasta que la hermandad les pague en su totalidad el adelanto efectuado
En marzo 1884 se acuerda variar el escudo de tela bordada que llevan los hermanos en la procesión de penitencia por otro de metal dorado, hecho por un solo modelo para que sean completamente iguales.
En abril de 1889 la reparación de la “carroza” del señor amarrado a la columna se manda a Sevilla al taller de Don Manuel Varga.
En Abril de 1892 se repara el nicho y retablo del Señor de la Sangre por encontrarse en estado de ruina y por lo tanto la corporación acordara lo que considerara oportuno en atención a lo que pudiera ocurrirle a dicha imagen, se propone hacer una novillada para atender esa y otras necesidades, si hay beneficio será para la hermandad y si hubiera perdidas será de cuenta de los diputados organizadores.
En agosto de 1896 Se acuerda cambiar el color de la vela de blanco con cruz azul a velas de color azul y la cruz blanca.
En enero 1898 se toma el acuerdo de hacer cabildo extraordinario todos los Domingos de Ramos para recordar a los hermanos la obligación que tienen de vestir la túnica de cofrade el jueves santo ya que en ese momento no llegaba al 10 % el numero de hermanos que se vestían habiendo muchos hermanos mas.
En abril de 1900, se compra y se pone para el jueves santo los respiraderos para el paso de la virgen lo pagan algunos hermanos de la hermandad.
En marzo de 1902, el secretario D. Juan Zorrero Delgado regala un cordón con calabrote de oro fino con los bordes del mismo metal para el cristo Sr. de la sangre amarrado a la columna y regala otro igual que después llevara la Virgen en forma de cinturón con una hebilla de oro bajo montado en pedrería se reserva la facultad de tenerlo en su poder durante su vida.
Ese mismo año unos hermanos costean unas potencias de plata sobredorada para el señor de la sangre amarrado a la columna que estreno en la semana santa.
En enero de 1904, con suscripción popular, se arregla la campana que se hallaba rajada y con parte desprendida de la misma, se aumenta en 46 kilos y para que pueda apreciarse que es de la referida cofradía se le pone el nombre de ilustre hermandad de la santa vera cruz con los mismos fondos se ponen dos más, a una se le pone el nombre de san Antonio Abad y la otra san Rafael porque esta ha sido costeada por don Rafael Pérez Delgado Arcipreste de esta ciudad.
En abril de 1928´se contrata la compra del nuevo paso del Señor de la Sangre atado a la columna con el artista Sevillano D. Manuel Fuentes vera en la cantidad de 9.000 pesetas.
En marzo de 1929, Domingo de Resurrección, por la cooperación prestada por nuestro hermano Don José Andrés Vázquez Pérez, residente en Sevilla, se acuerda por unanimidad nombrarle HERMANO HONORARIO, como así a su esposa Doña Josefa Marques Duran.
Teniendo en cuenta el afecto a la Hermandad de SS. AA. RR. Los serenísimos Señores Infante de España Doña Luisa de Orleáns y Don Carlos de Borbón, HIJOS ADOPTIVOS Y PREDILECTOS DE ARACENA, se acuerda por aclamación nombrarles MAYORDOMOS PERPETUOS DE HONOR.
Estos nombramientos fueron aceptados por sus AA.RR.
según telefonema que copiado literalmente dice así:
De Sevilla para Aracena=1 de abril de 1929=Mayordomo Real Hermandad Vera Cruz=Mis augustos Señores aceptan muy gustoso nombramiento que les comunico, agradecen sumamente deferencia Real Hermandad Vera Cruz=Saludan Cofrades=Bandaran, Capellan Real=
En atención servicios prestados a esta Real, Pontificia, Ilustre Primitiva y Venerable Cofradía por los Señores Marqueses de Aracena, se nombra por unanimidad a su hijo Don Miguel Sánchez Dalp y Marañon HERMANO CONCILIARIO DE HONOR
Se acuerda comprar un nuevo Palio para nuestra Reina la Santísima Virgen del Mayor Dolor, encargándose de ello el Hermano Honorario D. José Andrés Vázquez Pérez.
Debido a la magnifica labor de conservación de documentos que han realizados los secretarios de la Hermandad a través de los tiempos, hoy podemos estar orgullosos de la historia que encierra sus Archivos.
En la década de los sesenta, concretamente en 1965, se produce lo que podemos considerar el precedente de los actuales hermanos costaleros en el Jueves Santo.
De forma improvisada, catorce hermanos llevaron el Cristo de la Sangre.
Pero no es hasta 1978 cuando por primera vez procesiona con hermanos costaleros el paso de la Vera Cruz.
Un año a resaltar en esta breve historia de la Hermandad es 1998
En él se concede la Medalla de Oro por el Ayuntamiento de Aracena a la Virgen del Mayor Dolor.
Otra fecha de gran importancia es el 7 de abril de 2006, día en el se decreta por el Obispo de Huelva Don Ignacio Noguer Carmona la proclamación canónica de la Hermandad de la Primitiva, Real y Pontificia, Ilustre y Venerable Hermandad y Cofradía de Nazarenos de la Santa Vera Cruz, Santísimo Cristo de la Sangre y Nuestra Señora del Mayor Dolor, conservando sus títulos y antigüedad y aprobándose sus nuevas reglas.
El 17 de julio de 2007 se hace entrega al Ilmo. Sr. Don José Vilaplana Blasco, Obispo de Huelva, la solicitud de Coronación Canónica de la Virgen del Mayor Dolor.
Esta petición es el prólogo de los acontecimientos que se desarrollan a continuación y que culminarán con la Coronación de Nuestra Señora.
El 10 de febrero de 2008 en la función solemne de apertura del Cincuentenario del Patronazgo el Rvdmo. Sr. Vicario Episcopal para la Celebración de la Fe de la Diócesis de Huelva, Don Diego Capado Quintana, en nombre del Ilmo. Obispo de Huelva Don José Vilaplana Blasco, anunció que la Santa Iglesia Católica concedía la Coronación Canónica de Nuestra Señora del Mayor Dolor para el año 2010.
El 11 de septiembre de 2008 la Virgen sale en procesión hacia la Parroquia de Aracena terminada después de 480 años
El día 12 preside la consagración de la nueva Parroquia y al día siguiente sale de la misma para hacer Procesión extraordinaria con motivo del Cincuenta aniversario del patronazgo.
El 30 de marzo de 2009, en el transcurso del Solemne Novenario celebrado en honor a la Stma. Virgen, de voz del Sr. Obispo de Huelva se recibe el anuncio anhelado por sus numerosos devotos: “….he decidido que sea el 11 de septiembre de 2010, el día en que D. M coronaré la Imagen de la Excelsa Patrona de Aracena”.